Este evento, el Congreso Colombiano de Investigación Clínica, celebrado en Bogotá los días 11 a 13 de mayo de 2017, marcó un hito en la historia de esta disciplina en el país. Varias razones, como la unión de esfuerzos de las diferentes agremiaciones, la calidad de los conferencistas, la importancia práctica de los temas tratados y la asistencia masiva al evento, se sumaron para demostrar que contamos con el entusiasmo, el conocimiento científico y las habilidades técnicas necesarias para alcanzar un nivel de preponderancia en la investigación clínica de América y el mundo.
Pero es indudable que todavía tenemos mucho camino por delante. La investigación clínica está creciendo a un ritmo tan acelerado que los centros de investigación de los países desarrollados están saturados, y los patrocinadores buscan afanosamente dónde llevar a cabo sus estudios. Por esta razón, las naciones en vía de desarrollo con estándares de calidad comprobados, condiciones regulatorias estables, centros de investigación excelentes y sistemas de salud comprometidos con la investigación clínica, se están beneficiando de este incremento.
Sin embargo el número de nuevos estudios clínicos que se registran en Colombia, lejos de crecer, muestra un decrecimiento lento y progresivo; y los 118 centros de investigación certificados en BPC y debidamente avalados por el INVIMA, adolecen de falta de estudios suficientes para garantizar su supervivencia.
¿Por qué estamos viviendo esta situación? ¿Por qué estamos siendo cada vez menos atractivos para los patrocinadores si la demanda de nuevos estudios crece y se desborda en otras latitudes?
La búsqueda de respuestas a estas preguntas nos exige revisar a fondo toda la cadena de investigación clínica, de sus respectivos protagonistas como son las CRO, los centros de investigación, los comités de ética, la entidad regulatoria, etc.; y del entorno mismo de la investigación clínica en el país, que por desconocimiento, desinformación y tergiversación de conceptos dificulta su ejercicio y desconoce su importancia.
¿Cuándo es exitosa la investigación clínica?
La investigación clínica es exitosa cuando combina el rigor ético-científico con la calidad de los esfuerzos y el cumplimiento de los tiempos. Si el empeño por preservar la autonomía y protección de los sujetos, y garantizar la idoneidad y validez de las intervenciones no se acompaña de calidad y de tiempos rigurosos y predecibles en todos los eslabones de la cadena, la investigación fracasa.
Pero estamos seguros que este panorama va a mejorar y pronto. Colombia ha hecho ingentes esfuerzos por llamar la atención como país interesante para la investigación clínica, e instituciones como el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, Procolombia, la ANDI y Colciencias nos han ofrecido su acompañamiento y apoyo. Eso no lo vamos a perder. Además, el INVIMA ha demostrado que puede manejar tiempos de revisión de nuevos estudios en menos de 60 días, y está trabajando en la redacción de nuevas guías que nos ayudarán a ser más predecibles en el cumplimiento de los tiempos. Y por parte de ACIC, con el Plan 2020 y sus 9 indicadores de calidad, estamos empeñados en generar y mantener centros de excelencia que puedan competir codo a codo con los de otras latitudes, y lograr que los patrocinadores internacionales vuelquen su atención hacia Colombia y la vean como una potencia de investigación clínica en Latinoamérica.
Lo más importante es mantener el entusiasmo y no dejarnos afectar por dificultades puntuales. Ese entusiasmo es indispensable para superar los escollos y lograr que el futuro de la investigación clínica colombiana sea el que esta noble rama de la ciencia y la medicina merece.
Gracias a todos por su participación en el Congreso Colombiano de Investigación Clínica 2017.